Paseo tranquilo [Mikuo y Nerida]

Entre las cosas de la casa, los estudios que Elda y yo tenemos por nuestra cuenta, las cosas de comprar, trabajar... quise tomar un respiro por algún lugar que al menos te aleje un poco de la vida cotidiana. Al llegar hacía una agradable brisa e inspiré tras notar en olor del mar mientras cerraba los ojos. " Me encanta este olor... y la frescura que traen las nubes" A pesar del aire agradable, en realidad estaba nublado, pero me daba igual, casi lo prefería, porque normalmente el aire corre cuando hay nubes. El mar estaba bastante movido, con mucho oleaje. Tras andar un rato, decidí sentarme en la arena, cerré los ojos y me concentré en el sonido de las olas.

Estaba tan aburrida en casa, que no sabia que hacer, no paraba de morderme las uñas una y otra vez del dichoso aburrimiento, asi pues decidi salir a dar un paseo por la playa. Me acerque a la orilla del mar y meti los pies en el agua, estaba muy fresquita.. mientras que caminaba, veia a lo lejos a un chico sentado en la arena.. me acerque a él y salude

-Hola.. me llamo Nerida, Nerida Tower.. -Le dije con una sonrrisa de oreja a oreja
-Y tu ¿Como te llamas?

Respiraba lentamente hasta que, entre el sonido del oleaje, escuché la voz de una chica. En seguida abrí los ojos. Vi a una chica que parecía bastante simpática. -Soy Mikuo.Mikuo Hatsune, encantado de conocerte, Nerida... ¿Quieres sentarte conmigo?-Le pregunté alegre mientras mi boca esbozaba una sonrisa amplia y muy amistosa, me alegraba de que posiblemente, haya hecho alguna amiga. -Aunque, si quieres caminar y te acompañe, también está bien- Añadí por si prefería la otra propuesta.

Parecia muy relajado alli sentado, que tardo algo en contestarme.
-¡Igualmente! Claro que quiero, se esta genial aqui ¿No es cierto?-Me encanta conocer gente nueva, y el chico parecia muy amistoso y simpatico, me sonrreia y yo le devolvia la sonrria.
-Caminar tambien esta muy bien, como quieras.. si quieres podemos sentarnos un rato y luego caminamos..-Le decia mientras sonrreia
Me encantaba estar alli, me sentia libre y feliz.Y me sentia muy comoda al lado de aquel chico.

Era una buena idea lo que dijo. -Tienes razón, así hacemos ambas cosas, jeje- Le dije cerrando los ojos mientras sonrío. -La verdad, se está a gusto en todas partes... la gente suele preferir el cielo despejado, pero a mi me gusta nublado, así corre más brisa, ¿no crees?- Le dije con el tono lleno de optimismo, diciendo que ambos estados están bien en realidad. Estaba mirando el cielo mientras hablaba, pero la volví a mirar alegre cuando le pregunté. -La verdad, apenas conozco la gente de por aquí...- Añadí aunque no tuviera a cuento mientras me rascaba un poco la nuca.

Le parecio bien la idea de hacer las dos cosas, asi que estariamos alli un rato y luego paseariamos.
-Estoy totalmente de acuerdo, ¿Sueles venir mucho por aqui?-Le pregunte mientras observaba las olas del mar agitandose.
-No te preocupes, yo tampoco conozco a casi nadie e llegado aqui recientemente.
Llegaba un aire calentito, hacia algo de calor, el agua del mar estaba fresquita.
-Hace un poquito de calor, me apetece darme un baño ¿Te apuntas?-Le dije con cara alegre.

Miré el agua del mar pensando que a lo mejor estaba bastante fría, pero también era verdad que no la había probado. -Vale, pero espera, me tengo que quitar la parte de arriba.- Le dije señalando mi corbata y la camisa mientras reía un poco. Primero me quité la corbata y luego la camisa. -Espero que no esté helada... lo digo por el temporal...- Añadí mirando el tiempo que había. -Aunque antes etsaba haciendo mucha calor, puede que conserve la calor de antes...

Sonreí ampliamente y me metí en el agua. -Carai, para el mal tiempo que hace y el oleaje, no se está nada mal- Le dije algo asombrado por encontrar el agua tan buena. VEia como pasaba las olas y recordé cuando era niño y jugaba con Elda. -¿Quieres que te enseñe un juego para aprovechar el oleaje?- Le preguntaba algo costoso debido a que las olas no paraban de empujarme y trataba de no tragar agua. -Se trara de esperar en cuclillas a que una ola bastante fuerte llegue, cuando es así, saltas justo cuando la ola nada más te alcance, parecerá que eres parte de la ola pues te arrastra casi como a una tabla de surf.-

Me alegré de que ella le gustara ese juego. Cuando señaló, la miré y luego me coloqué en posición. Nada más llegar, me lanzo junto a la ola. Al ver que ella no estaba, miro atrás y nado hacia ella. -¿Estás bien?- Le pregunté mientras nadé hacia ella. Al sonreír ella, yo le sonreí con amabilidad.-Si te haces daño, quiero que me lo digas, te ayudaré en lo que pueda- Le dije de la misma forma en la que le sonreí. -¿Vale?- En la última pregunta, sonreí ampliamente.

Al salir a la superficie el venia nadando hacia mi, bastante preocupado.

-Si tranquilo, estoy bien, solo que me e bloqueado por un momento y no reaccione. Pero estoy muy bien.-Le dije mientras tosia un poquito por el agua tragada.

-Te prometo que te lo dire si me ago daño-Le dije sonrriente

-Sabes se que te he conocido hoy, pero me alegro de averlo hecho, creo que podriamos ser bueno amigos-Le dije muy alegre y sonrriente

Jugamos un poco mas a ese juego tan divertido, y luego le dije que me saldria un poco,notaba mi piel muy envejecida de todo el tiempo bajo el agua.Me sali y me tape un poco con el vestido.

Sonreí como respuesta a la suya. Me lo pasé en grande jugando con ella a las holas, como cuando era pequeño. La acompañé mientras que salía del agua. Luego vi un pequeño puesto. -¿Te apetece tomar algo, Nerida?- Le pregunté animado. -Podría comprar un helado- Añadí alegre mientras cogí mi camisa, pero no podía cubrirme con ella, pues era demasiado fina. Tampoco tenía toalla porque no tenía planes de bañarme antes de que Nerida llegara. Miré mi cartera y tenía suficiente dinero para invitarla. Elevé mi mirada y esperé a saber qué decidía pacientemente

Había sido un gran dia, muy divertido y no queria que terminara.

-Si claro, tomemos algo, que de estar en el agua pues apetece algo.. -Le dije mientras que le sonrreia
-Un helado ¡Que rico!

Me alegre mucho de averle conocido, era un gran chico y muy simpatico. Los dos no teniamos con que secarnos asi que fuemos mojados acia aquel puestecito, y pedimos unos helados.

-Gracias por invitarme, otro día que nos veamos te invito yo a tomar algo, prometido. -Le dije sonrriente.

Asentí cuando me prometió que a la próxima invitaba ella. Al llegar, me quedé mirando los helados que habían y me interesó el de menta. -¿De qué lo quieres?- Le pregunté a Nerida dejando que los viese para elegir. -Yo me pido el de menta- Añadí mientras ella se decidiera. Habían bastantes sabores en el lugar. Dejé tiempo para que elijiera, aunque también podía pedir de dos sabores si se pedía en tarrina. Yo me lo pediría en una tarrina mediana. Una pequeña hay poco y me deja con ganas, en una grande ponen demasiado, pues lo mejor para mí era la mediana.

Dudaba del sabor, no sabia cual elegir, todos los sabores me gustaban, asi que me decante por el de vainilla.

-Yo quiero el de vainilla -Dije muy contenta

El se cogio el de ,enta con una tarrina mediana, pero yo sin embargo la preferia pequeña, no me queria llenar mucho, ademas tal vez luego dejase algo.

-Mientras que comemos los helados ¿Te apetece que demos un paseo?-Le dije mientras probaba el helado, que por cierto estaba muy rico.

Le dije al encargado lo que queríamos y pagué los helados. Le dí a Nerida el de vainilla mientras dio la propuesta de que podríamos hacer. -¡Claro! de hecho habíamos planeado eso antes. - Respondí aceptando lo que había dicho. -¿Te apetece que paseemos cerca de la orilla?- Le propuse por si le apetecía sentir el mar en los pies mientras camináramos y nos tomábamos el helado, podría ser muy agradable a parte de que el agua marina es bastante buena.

El me dio mi helado y cogio el suyo.

-Es cierto, no me acordaba, si es que mi memoria me juega malas pasadas.

-Si, por favor cerca de la orilla que bien. Le dije mientras que me reia.

Fuimos hacia la orilla y metimos los pies en el agua, esta anocheciendo y eso hacia aun mas bonito el mar.

-Que bonito esta el mar anocheciendo, se ve todo tan hermoso.

Le dije mientras que le miraba.

-¿Quieres probar mi helado? Esta muy rico.Le dije alegre.

Comencé a tomar el mío mientras que empecemos a caminar por la orilla. Escuché de ella que estaba anocheciendo y observé el mar, la verdad, si estaba precioso. Entretuve mi mirada en el mar, el paisaje me cautivaba. La voz de ella hizo que me girara la cabeza. -De acuerdo-Dije de forma como siempre hablaba, sonriendo, y cogí micuchara para tomar un poco. - Sí, está muy rico, el mio también está bastante bien,¿Quieres probarlo también?- Se lo dije ya que si yo pruebo el suyo, lo justo es que ella, si quisiera, también lo probara, sino sería egoísta de mi parte. Sentía como el agua mojaba mis pies y esa sensación me encantaba, el agua del mar siempre calmaba bastante.

El quiso probar mi helado. Cogio su cuchara y tomo un poco de el.
-Se que esta rico, es uno de mis favore favoritos. Si claro, gracias.

Cogi mi cucharilla y prove su helado. Estaba delicioso. Aun que me manche un poco en la nariz. Sinceramente no entiendo como llego el helado ahi. Pero bueno. Intente quitarmelo con la lengua pero apenas llegaba.. El mientras me veia y vi como se le escapaba alguna sonrrisa.

-No llego, jolines. Me hacia ilusion quitarmelo asi, pero bueno, ¿Tienes alguna servilleta o un papel?Le pregunte

Es que no queria quitarmelo con la mano, me parecia un poco de guarretes, aun que ahora que lo pensdaba aver intentado quitarmelo con la lengua no es de ser muy pulcro.. pero me hacia mucha ilusion.

Me reí un poco cuando se manchó la nariz, pero cuando ella preguntó si tenía algo, supe que no llevaba.

-Lo siento, no me traje... - Me disculpé por ello. Miré a todas partes para ver pero nada. Se me ocurrió algo. -Ahora vuelvo.-

Fui corriendo de nuevo al local y pedí un paquete de pañuelos de papel. Nada más comprarlo, me dirigí a donde estaba Nerida. -Ahora sí tengo, toma- Nada más decir eso, me reí un poco mientras le entregué el pañuelo de papel.

Al pedirle si tenia un pañuelo o algo me contesto que no.

-Joo pues valla..

A el se le ocurrio una idea, y fue directo hacia el puestecito, y me cogio un paquete de pañuelos.

-Ohh que caballero, muchas gracias, eres genial.

A continuacion saque un pañuelo y me limpie la nariz.

-Joo hace un rato se estaba genial, pero si te soy sincera comienzo atener un poquito de fri, es que soy asi de rara.

-¿Tu no tienes algo de frio?-Le dije observandole.

Mientars que caminabamos algo brillaba en el suelo de la playa, me pregunte que seria, asi que anduve un poco mas deprisa que Mikuo y me dirigi a coger aquello, era una perlita.

Mira Mikuo, que bonita es.

Cuando comentó lo del frío, no era de extrañar teniendo en cuenta la hora que era.

-Tranquila, no es nada raro, se ha hecho tarde... siento algo de frescor...- Le comenté mirando el cielo. Comenzó a andar más deprisa que yo y me detuve un momento hasta que me dijo que mirara algo.

Resultó ser una perla y me fijaba mucho en ella acercando mi cara. -Sí, es preciosa... no se suelen encontrar perlas así... que suerte tienes...- Decía mientras seguía mirando la bolita blanca.

El sentia tambien un poquito de frescor, si era cierto es que las horas que eran, pues era muy normal.

-Si, es cierto, a estas horas es muy normal.-Le comente mientras que tiritaba un poco de frio.

Cuando fui a por la perla el se detuvo a esperar, luego se la enseñe y le gusto.

-Si es preciosa, pero seguro que la pierdo, soy un poco despistada, me gustaria mucho que te la quedaras tu, me aria mucha ilusión, asi tendrias un recuerdo de esta noche.-Le decia con una sonrisa.

Me sorprendí que me la quisiera dar. Por un momento no supe que decir.

-Pues...gracias, Nerida... no hacía falta pero...- Le respondí sonriendo llevándome una mano detrás de la cabeza rascándola un poco y cerrando los ojos de forma amable y muy agradecida.

La cogí y la miré de nuevo sonriendo y torcí la cabeza un poco cerrando los ojos de forma alegre por confiarme la perla. -No la perderé, te lo prometo.- Le aseguré para que se sintiera más segura de ello.