Disfrutando de las vistas.(Libre)

Fui volando con mi forma de murciélago a la montaña a relajarme y a dejar de pensar en el tema de las peleas. Quería relajarme un poco y encontré un pequeño claro con unas vistas magníficas.

Me quité la forma de murciélago encima de una roca donde me tumbé y me puse a mirar el cielo. Cerré los ojos y me puse a pensar en mi pasado, con mi familia...fueron pocos años, pero intensos.

La luz del Sol hacía que mi palidez resaltara más de lo normal, no había ni una nube que pudiera tapar el Sol.

Llegué aprovechando el buen tiempo a una zona de la montaña bastante boscosa. Busqué la sombra de los arboles, pero al adentrarme entre ellos percibí un olor familiar. Avancé a ciegas entre los arboles, hasta llegar a un claro donde tumbada sobre una roca encontré una silueta familiar.

Oí algo entre los arbustos, no me asusté, pensé que sería un animal...y yo tenía hambre, pero al asomarme descubrí que no era del todo un animal, era medio animal, ¡¡ERA NAWO!! me hizo muchísima ilusión verla y corrí delante suya, sin tocarla porque se pone nerviosa.

-¡¡¡¡Nawo!!!! ¡Hola! ¿Qué tal estás? Cuanto tiempo. Estaba deseando verte. -se me notaba que estaba emocionada...demasiado...así que decidí tranquilizarme un poco.

De todo lo que había corrido tenía la respiración alterada y mis pupilas se habían dilatado, me costaba hablar y me tuve que sentar en el suelo mientras se me enganchaban las medias en todas las ramas.

Sonreí tímidamente ante tanta efusividad. Lo cierto era que me alegraba de verla. Me senté a su lado observando que yo no era la única con problemas por las ramitas. Había tenido que atravesar unos arbustos para llegar a donde estaba, y en esos momentos mi imagen era la de un gato salvaje.
Me senté a su lado guardando las distancias y la miré.
- Me alegro de verte, ¿que haces por aquí?

Se sentó a mi lado y observé que tenía ramitas por todas sus orejas gatunas. Se las quité pero sin agresividad, no quería que se sintiera incómoda. Y ya de paso la peiné un poco, pero muy poco y suave y alejada.

-Pues nada, aquí relajándome y pensando en mis cosas ja, ja...¿y tú?

Noté sus manos por mi pelo, peinandolo y quitandole ramitas y sonreí un poco mientras la miraba. Agité las orejas algo contenta y me tumbé boca arriba junto a ella
- Yo buscaba algún lugar donde pensar- dije con voz alegre y tranquila.

La observé cómo sonreía...y me pareció extraño nunca sonreía mucho, pero eso me agradó bastante.

-Pues aquí créeme que se piensa bastante bien ja, ja... es un sitio demasiado tranquilo, creo que vendré por aquí a menudo...-me tumbé con ella.

Justo en ese momento pasó un pájaro por encima de nuestras cabezas, quise ir a atraparlo, pero por educación me quedé tumbada a su lado pero con unas ganas irremediables de salir volando tras él.

Me sobresalté un poco al oír el pájaro pasar, pero no me moví, el único signo de ese pequeño susto fueron mis orejas, que se levantaron alerta. Tras comprobar que no pasaba nada cerré los ojos dejando que un cansado suspiro escapara de mis labios.
Estaba bien ese lugar, tal vez allí si pudiera pensar sobre como era eso de organizar una boda. Un momento...me incorporé y miré a Lere. Era perfecto el haberme encontrado con ella, ¡ella seria mi solución! Me coloqué a cuatro patas mirándola con una pequeña sonrisa. Y si ella no podía ayudarme...siempre estaba Emily, con la cual también tendría que hablar.
-Lere...que sabes tu sobre bodas?- pregunté con tono curioso al tiempo que ladeaba la cabeza, observándola mientras esperaba su respuesta.

El pájaro se fue y me tranquilicé, me puse a pensar sobre mi casa de cuando era pequeña, era un castill tan grande comparado con la de ahora... Y de repente me sobresalté al ver cómo Nawo se ponía a cuatro patas mirándome no sé...me dio...¡MIEDO! y lo reflejé en mi mirada hasta que oí su pregunta...¡¡Bodas!! No es que supiera mucho de ellas, a ver, me había colado en algunas para ver cómo eran y qué decían, pero casi nada más... Pero...¿para qué quería Nawo saber de bodas?

-¿Bodas? Pues no mucho...que hay que organizarlas bien, que hay un novio y una novia, un cura... ¡lo elemental! Pero a ver tú pregúntame más específicamente a ver si te puedo responder...y una pregunta...¿para qué quieres saberlo?

Me senté de rodillas mientras la escuchaba atenta. Tampoco me había aclarado mucho, sabía que habría que organizarla bien, y ahí es donde tenía mis dudas. Ladeé un poco la cabeza pensativa y la miré.
- ¿Y como se organizan?- pregunté, y ante su pregunta no pude evitar sonrojarme un poco mientras una pequeña sonrisa se formaba en mis labios.
-Pues...necesito saberlo...porque...- la miré algo nerviosa- necesito organizar una- dije, tratando de que entendiera a lo que me refería.

Me quedé pensando...tenía que organizar una...¿de una amiga? o....¡¡la suya propia!! Los ojos se me abrieron como platos y mi expresión de la cara era de entusiasmo y felicidad, ¡una amiga mía se casaba!

-¡¿ TE CASAS?!-Fui a darla un abrazo con los brazos abiertos de par en par, pero de repente me acordé de que no le gustaba mucho el contacto físico y lo dejé estar- ¡Ala! Qué emoción, me alegro muchísimo por ti, Nawo. Te doy mi bendición-me reí- Bueeno a ver...-dije volviendo en mi-pues lo primero, necesitas un sitio para casarte, ya sea una iglesia-esa idea me repugnó y se notó demasiado en mi expresión de la cara-, la playa, un restaurante, ¡donde sea! (lo tienes que reservar) y... a ver, depende de lo grande que sea el sitio en el que te vayas a casar, la lista de invitados, si quieres una boda tranquila pues pocos, pero si quieres que sea una fiesta constante invita a mucha gente, no sé, depende de tus gustos(claro está, no te pases de invitar, a ver si no van a caber en el sitio de la boda). Lueego... el cura o juez o lo que sea, lo contratas para tu gran día, después la decoración: flores, asientos, alfombras,...y un largo etcétera. El sitio del banquete...comida o cena, depende de si haces la boda por la mañana o por la tarde. Y..pues ya no se me ocurre nada más... ja, ja...¡A casarte!

Creo que se me notaba demasiado que estaba emocionada... y procuré relajarme un poco, me senté más cómodamente y respiré hondo.

-¿Te he resuelto algo? Cuando me relaje un poco alomejor se me ocurre algo más para decirte... De momento dime, ¿quien es el afortnado?

Sonreí al ver su reacción, parecía contenta. La escuché atenta y miré de recordar todo lo que decía.
- Pues...es Leon- dije sonriendo de oreja a oreja. No sabía que mas decirle, y por primera vez, me abalancé sobre ella abrazándola, dejándome llevar por su entusiasmo.
- Vendrás, no?- dije mirándola sonriente.

Me escuchaba muy atenta y me alegré mucho de que fuera León el afortunado... Empecé a sonreir como una loca, daba hasta miedo, estaba... ¡¡feliz!!

Me asusté cuando se abalanzó sobre mi dándome un fuerte abrazo, ¿en serio era Nawo? No me esperaba eso de ella ja, ja. Larespondí al abrazo lo más fuerte que pude, pero sin hacerla daño, claro.

-Claro que iré, ¿por quien me tomas?- y me empecé a reír a carcajadas, me había vuelto a alterar.- Y..¿cuándo va a ser? Y ¿dónde?

Me reí un poco, ¿sería por la emoción? Al oír que iría sonreí aún mas.
- Pues...aún no se nada...tendría que hablarlo con el, y en cuanto esté organizado, te lo diré- dije mientras volvía a tumbarme mirando el cielo. Teníamos mucho que organizar, aún no sabía ni por donde empezar.

Me había alegrado mucho de que Nawo me hubiera invitado a la boda, y empecé a pensar en las cosas que habría que hacer... necesitaré un vestido...creo que tengo alguno por el armario...pero es demasiado antiguo, pero bueno, unos arreglillos y estará modernizado.

De repente los ojos se me abrieron como platos me puse a su lado de rodillas y la zarandeé, pero muy flojito, yo estaba demasiado alterada para responder de mis actos.

-¡Tienes que comprarte un vestido! Y lo más importante...¡¡Tenemos que hacer una despedida de soltera!!

Noté como me zarandeaba y la miré, tan buena noticia era una boda? Sonreí algo nerviosa y la miré ladeando la cabeza algo confusa tras escucharla.
- ¿despedida de soltera? ¿eso que es?- dije obervandola atenta, esperando una explicación de lo que me había dicho. El vestido...no lo había pensado, pero es cierto que necesitaba uno...¿pero como debían ser esos vestidos?
Moví un poco la cola mientras pensaba y esperaba a que me respondiera. Cada vez sabía mas sobre las bodas, era una suerte tener una...¿amiga? era mi amiga..¿no? pues eso, una suerte tener una amiga que supiera tanto sobre el tema.

¡No sabía lo que era una despedida de soltera! Bueno, habría que explicárselo..

-La despedida de soltera es la noche de antes de la boda, o unos días antes, cuando te de la gana, y ahí haces una fiesta con tus amigas... puede ser de lo que quieras, una fiesta en tu casa, en un bar, con chicos (boys jejeje), o simplemente para hablar.

Ya me empezaba a quedar sin ideas para las bodas, espero que no me preguntara más que ya no la sabría responder.

Sonreí entusiasmada por la idea y asentí de forma enérgica al tiempo que la abrazaba estrechándola con fuerza.
- Gran idea!- dije separándome un poco y mirándola emocionada ¿que me pasaba? ¿acaso confiaba tanto en ella? Me di cuenta de mis actos y me separe un poco sonrojandome ligeramente, me estaba tomando demasiadas libertades.
- Bueno...pero ¿me ayudarías? Con el vestido... la fiesta... es que parece que sabes bastante mas que yo, y no me gustaría meter la pata- dije sonriendo un poco.

Me quedé de nuevo sorprendida, ¿¡Nawo me había abrazado otra vez!? Era muy extraño, pero pensé que sería por la emoción de la boda, la respondí al abrazo y con una amplia sonrisa la cogí del brazo y me la llevé a medio arrastras fuera del bosque.

-¡Claro que te ayudo! Pero primero vamos a probarnos un vestido, luego lo demás, tienes que estar guapísima en tu gran día, aunque es difícil que te superes ja, ja- y la guiñe un ojo con una sonrisa.

Sonreí agradecida mientras notaba como me arrastraba (prácticamente) fuera del bosque, tal vez consiguiera el vestido antes de lo que pensaba.
- Esta bien, y de paso miramos para ti también- dije con una sonrisa mientras abandonabamos el lugar.